El partido acabó 2-2 pero este jugador metió los 4 tantos

El equipo de este defensa acabó 2-2, pero él logró los 4 goles del partido

El 20 de marzo se cumplieron exactamente 45 años desde que Chris Nicholl marcó cuatro goles en un partido de la máxima categoría.

4 goles no se marcan todos los días. Hasta celebramos los hat tricks de nuestros futbolistas favoritos.

Pero ¿cuantas posibilidades hay de que marques los goles de tu equipo y también los del contrario?

Pues así sucedió en el encuentro en que el defensa Chris Nicoll brilló con luz propia.

Desastre y triunfo en el mismo partido

Definitivamenete este partido puede dar lugar a una película, porque esto no se ve todos los días.

Era el 20 de Marzo de 1976 y jugaban el Aston Villa contra el Leicester. Nicholl jugaba de defensa central para el Aston Villa.

Además Chris Nicholl era un defensa muy bueno. No puedes jugar 648 partidos de liga (la mayoría de ellos en la máxima categoría) o ganar 51 partidos internacionales con Irlanda del Norte si eres malo.

Su calidad era incuestionable. Capitaneó al Aston Villa al triunfo de la Copa de la Liga en 1977, ganando la final en el tiempo añadido, Un partido en el que anotó un obús de 30 yardas para llevar el juego a la prórroga.

Pero veamos como sucedieron los hechos para el partido que acabó 2-2 con 4 goles de un solo jugador.

Aston Villa 0 – Leicester 1

Pero nada igualó su actuación el 20 de marzo de 1976, con Villa interpretando todos los papeles en el Leicester City defensa, delantero y lo que cayera.

Después de 15 minutos de partido, Nicholl, siempre una presencia combativa en defensa, se abrió camino hasta el delantero del Leicester Brian Alderson. Para evitar el peligro le pasó el balón a su portero con un cabezazo. 

El meta del Aston Villa, John Burridge, no se esperaba esto. Así que el balón se coló en su portería

Aston Villa 1 – Leicester 1

Cinco minutos antes del medio tiempo, Nicholl volvió a anotar. Esta vez en la portería correcta. Aprovecho una asistencia con la cabeza de Brian Little para enganchar el balón y dsparar a corta distancia. Era el 1-1

Aston Villa 1 – Leicester 2

A los ocho minutos de la segunda mitad, el espectáculo de Chris Nicholl comenzó a alcanzar proporciones ridículas. El defensa intentó sacar un centro de Frank Worthington con un cabezazo acrobático. Lógicamente la pelota acabó en su propia red.

Desde entonces el propio jugador lo ha descrito como el mejor gol de su carrera; fue una lástima que fuera contra su propio equipo. 

Aston Villa 2 – Leicester 2

Finalmente, a falta de cuatro minutos para finalizar el partido, Villa logró un córner. En esa jugada parecia lógico que Nicholl lograra un cierto balance del universo futbolístico, mientras trotaba hacía el área contraria.

Efectivamente, después de un zafarrancho en la portería, nuestro hombre estaba allí para pegarle al balón.

Así el encuentró acabó 2-2.

La pelota se la quedó el arbitro

Comprensiblemente deseoso de guardar un recuerdo después de su inusual “hat-trick”, Nicholl le pidió al árbitro el balón del partido. Sin embargo, era el último partido del colegiado y quería quedárselo para él.

Al menos Nicholl tuvo la dudosa compensación de ser el sexto máximo goleador del Leicester esa temporada.

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